Propósito y valores

Promover el bienestar físico, emocional y espiritual en la comunidad con un modelo de atención centrado en la persona y fundamentado en los valores cristianos.

cometes
“No se trata simplemente de colocar el paciente en el centro, sino de entender que es él quien da sentido a nuestra vida profesional”

Un hospital centrado en valores

La vida en un hospital es muy activa y exigente, pero una atención técnica-sanitaria de calidad debe ir siempre de la mano de un trato personal. En el Grupo asistencial evangélico hemos configurado nuestro «sello», que muestra los cinco valores que definen nuestra organización:
Integridad | Compasión | Excelencia | Cooperación | Fe

Integridad

  • Confiable: lo que decimos lo cumplimos. Somos una organización honesta, correcta y no generamos falsas expectativas.
  • Autocrítico: reconocemos los errores y asumimos las responsabilidades.
  • Valiente: abordando conversaciones difíciles cuando corresponde.

Compasión

  • Escucha activa: sabemos escuchar, ser receptivos y respetuosos.
  • Empático: nos preocupamos por conocer la necesidad y conectarnos de corazón.
  • Resolutivo: ofrecemos ayuda práctica, dando respuesta ágil y llevando a cabo las acciones necesarias.

Excelencia

  • Autoexigente: nos comprometemos en el cumplimiento de objetivos y el trabajo bien hecho.
  • Proactivo: nos anticipamos a las necesidades del paciente y trabajamos para su seguridad.
  • Formación: fomentamos la capacitación y el desarrollo continuo de nuestro equipo, a nivel técnico y humano.

Cooperación


  • Alineación del equipo: promovemos la comunicación de objetivos, información clave y resultados, generando confianza, cohesión y sentido de pertenencia.
  • Trabajamos por el bien común: nos esforzamos por crear un buen ambiente, buscando el éxito del proyecto más que el propio y así obtener mejores resultados.
  • Nos cuidamos: valoramos las diferencias, respetamos las opiniones y argumentos de todos, atendiendo las relaciones entre nosotros.

Fe

  • Gratitud: agradecemos el legado recibido y las oportunidades diarias.
  • Compromiso: entendemos nuestra historia, cuidamos el presente y sus recursos, trabajamos para el bienestar de la comunidad y así conseguir un futuro mejor.
  • Actitud resiliente: desde nuestra identidad cristiana, superamos los obstáculos y afrontamos los retos con confianza y optimismo.
  • Sensibilidad espiritual: atendemos a la persona desde una perspectiva holística, respetando y siendo sensibles a sus creencias.